Darwin gana su
primera batalla judicial en EE UU frente al nuevo creacionismo
Un juez de Pensilvania prohíbe
enseñar en la escuela pública la teoría
del 'diseño inteligente'
EL PAÍS / AGENCIAS - Harrisburg
EL PAÍS - Sociedad - 21-12-2005
La teoría del diseño
inteligente, nuevo rostro científico del creacionismo
norteamericano, salió ayer derrotada en un tribunal
de Harrisburg (Pensilvania, EE UU), tras un juicio que había
suscitado una gran expectación por ser el primero
en que ese movimiento académico se sometía
a un dictamen judicial. El juez de distrito John Jones III
sentenció que el Consejo de Educación de Dover
no puede, como pretendía, abrir las aulas a la enseñanza
del diseño inteligente, que sostiene que los seres
vivos son demasiado complejos como para haberse generado
por los mecanismos evolutivos propuestos por Darwin.
"Los objetivos laicos aducidos
por el Consejo de Educación no son más que
una excusa para su objetivo real, que era promover la religión
en las aulas de la escuela pública", escribe
el juez Jones en su sentencia de 139 páginas. La
resolución judicial puede enfriar otras iniciativas
estatales de los partidarios del diseño inteligente,
próximos a la derecha religiosa de EE UU.
A principios de noviembre, el Consejo
de Educación de Kansas aprobó por seis votos
a cuatro una propuesta para enseñar en los institutos
la teoría del diseño inteligente como una
explicación científica
de la vida. El Consejo de Dover, al que se refiere la sentencia
judicial de ayer, ya lo había hecho hace un año.
Los consejos de educación no pueden dictar qué
se enseña a los alumnos de las escuelas públicas,
pero sí definir qué conocimientos deben acreditar
para pasar los exámenes estatales.
El pasado 1 de agosto, el presidente
George Bush hizo unas sonoras declaraciones en defensa de
la enseñanza de "ambos, el diseño inteligente
y la evolución, de modo que la gente pueda entender
de qué va el debate". El juez Jones, que fue
nombrado para el cargo por Bush en 2002, escribe en su sentencia
de ayer: "Los estudiantes, los padres y los profesores
del distrito escolar de Dover merecían algo mejor
que ser arrastrados a este torbellino legal, con el consiguiente
y completo desperdicio de recursos monetarios y personales".
Los partidarios del diseño
inteligente también habían logrado que en
los textos de ciencias de las escuelas públicas del
distrito se agregara un aviso en el que se indicaba a los
estudiantes que "la teoría de la evolución
es sólo una teoría, no un hecho científico".
Durante seis semanas, el tribunal escuchó a testigos
de ambas partes en un juicio seguido con atención
en otras partes del país, donde la controversia continúa,
promovida por grupos religiosos que ven en las teorías
darwinianas una amenaza a sus creencias. En su dictamen,
Jones afronta la cuestión fundamental de si el diseño
inteligente es ciencia, para responderse: "Hemos llegado
a la conclusión de que no lo es, y además
de que el diseño inteligente no puede desacoplarse
de sus antecedentes creacionistas y, por lo tanto, religiosos".
El distrito escolar, cuyo Consejo
de Educación ya ha sido en su mayor parte desalojado
del cargo por los votantes, había sido demandado
por un grupo de 11 padres que aducían que la enseñanza
del diseño inteligente es inconstitucional, y que
no tiene cabida en el programa de biología. El juez
les ha dado ahora la razón.
"Es una victoria para la enseñanza,
una victoria para la ciencia y una victoria para la enseñanza
de la ciencia", comentaba ayer Christy Rehm, una de
las demandantes, informa Reuters. La Unión Americana
para la Separación de Iglesia y Estado señaló
que la sentencia es "un notable revés para los
esfuerzos de la derecha religiosa de colar en la escuela
pública sus dogmas fundamentalistas bajo el disfraz
de teorías científicas".
Casey Luskin, un portavoz del Discovery
Institute, principal lobby del diseño inteligente,
comentó: "El juez cree que el diseño
inteligente es una explicación sobrenatural, pero
está claro que no lo es. Por lo tanto, toda su decisión
está basada en una percepción errónea
de la teoría. Legalmente hablando, esto no es de
ningún modo el final del asunto". Jones sólo
tiene jurisdicción sobre parte de Pensilvania.